lunes, 2 de octubre de 2017

EL PUCHERAZO: 90 POR CIENTO DE 'SÍES' DE 2.262.424 VOTOS

EL PUCHERAZO: 90 POR CIENTO DE 'SÍES' DE 2.262.424 VOTOS

Puigdemont sugiere que declarará la independencia tras un referéndum ilegal y chapucero

Tanto Puigdemont como Junqueras insisten en que trasladarán los datos al Parlament "para que actúe de acuerdo con lo previsto en la Ley de Referéndum". El "SÍ" se impuso este domingo con un 90 por ciento de los votos, según el Govern. Por Javier Cámara
El presidente de la Generalidad, Carles Puigdemont, realizó una declaración institucional tras el referéndum independenista de este domingo en la que aseguró que "los ciudadanos de Cataluña nos hemos ganado el derecho a tener un Estado independiente que se constituya en forma de república".
De esta manera Puigdemont concretó que trasladará los resultados en los próximos días al Parlamento de Cataluña "para que actúe de acuerdo con lo previsto en la Ley de Referéndum".

Según el artículo 4.4 de la ley de referéndum, aprobada por el Parlament y suspendida por el Tribunal Constitucional, si el 'sí' a la independencia sale vencedor, el Parlament, "dentro de los dos días siguientes a la proclamación de los resultados por parte de la Sindicatura Electoral, celebrará una sesión ordinaria para efectuar la declaración formal de la independencia de Cataluña".

El "Sí" gana con el 90 por ciento de los votos

El portavoz de la Generalidad, Jordi Turull, hizo públicos los datos "oficiales" de la votación del referéndum. Según Turull, el número total de votos de este domingo ha sido de 2.262.424, donde el "Sí" se ha impuesto con el noventa por ciento de los votos, obteniendo un total de 2.020.144 de ellos.
El "No" se quedó con el 7,8 por ciento de los mismos, sumando 176.566, mientras que en blanco han quedado 45.586 y nulos 20.129.
Teniendo en cuenta el censo de 5.313.000 personas y las 2.262.424 papeletas, la participación sería del 42%, aunque el Govern no ha ofrecido un porcentaje concreto porque ha subrayado que han habido "votos robados", urnas retiradas por la policía y 400 centros cerrados que han alterado resultados. El conseller de Presidencia ha considerado, así, que sin esa "situación excepcional" se podría haber llegado al 55%" de participación.

Por su parte, el vicepresidente del Govern y conseller de Economía, Oriol Junqueras, ha señalado que Cataluña "ha demostrado su desconexión ante un Estado profundamente autoritario", por lo que ha considerado que se ha "ganado el derecho de poder constituirse en república si así lo decide el Parlament"

"Seremos consecuentes con el mandato democrático que los ciudadanos nos han encomendado", ha añadido Junqueras, que ha remarcado que el Govern "trasladará los resultados -del referéndum- al Parlament, que es a quien le corresponde la decisión" sobre la declaración unilateral de independencia.

Por su parte, el conseller de Asuntos Exteriores, Raül Romeva, ha instado a Europa a escoger entre la "vergüenza y violencia" del Estado o la "dignidad y democracia" de Cataluña. El titular de Exteriores ha aseverado que han habido "muestras de apoyo, acompañadas de indignación", de diferentes actores internacionales de "enorme relevancia política", sin mencionar nombres.

Jornada marcada por la cargas policiales

Las cargas policiales ante los colegios electorales y el irregular sistema de votación han marcado el 1-O, en una jornada en la que Policía y Guardia Civil han tenido que asumir la retirada de las urnas para impedir el referéndum suspendido por el Tribunal Constitucional.

Aunque los Mossos aseguran que son 244 el número de colegios cerrados, el Ministerio del Interior informa de que son 92 los clausurados. Además, se han detenido a 6 personas, entre ellos un menor de edad, por resistencia, desobediencia y atentado a agentes de la autoridad.
La intervención de la Policía Nacional y la Guardia Civil se ha visto rodeada de momentos de tensión con los manifestantes independentistas en los centros de votación. Los agentes han tenido que retirar por la fuerza a algunas personas. Se han contabilizado 844 personas heridas en los altercados, más nueve policías y tres guardias civiles que también han tenido que ser atendidos.

Agentes de los Mossos d'Esquadra y la Guardia Civil se han encarado en varias ocasiones por las intervenciones del instituto armado para cerrar los centros de votación. Seis juzgados de Cataluña han abierto diligencias para investigar la actuación de los Mossos por no haber impedido la votación.

Larga lista de irregularidades

Varias son las trampas que la Generalidad y los organizadores del referéndum ilegal del 1-O habían pergeñado para sacar adelante la jornada electoral y todos ellos han sido anulados por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
Así, desde el Ministerio del Interior se ha ido informando a lo largo del día de los centros de votación que se habían "neutralizado", pero ha sido precisamente sustituir a los Mossos una de las actuaciones que han tenido que llevar a cabo tanto la Policía como la Guardia Civil al comprobar cómo la policía catalana estaba permitiendo el funcionamiento de los colegios electorales entre los aplausos de los independentistas y simplemente se limitaban a levantar acta de que estaban en marcha.
Dentro de estas actuaciones, las fuerzas del orden se incautaron de urnas, algunas de ellas, incluso, con votos ya en su interior porque ya se había empezado a votar. Esto demuestra, tal y como se vio también después, la falta de control sobre el sistema de voto. Sin censo, sin papeletas (algunos se las han imprimido en sus casas), sin sobres para preservar el secretismo del voto, sin urnas transparentes ni precintadas en las que se pudiera comprobar si habían sido manipuladas, sin mesas, sin vocales y sin una Junta Electoral Central que diera plenas garantías de la limpieza del proceso, todo ha sido un descontrol.
En un vídeo se ha podido comprobar cómo a una mujer se le caía una urna antes de abrir el colegio y por el suelo se desparramaban papeletas de voto. Igualmente, la entidad Sociedad Civil Catalana ha difundido imágenes en las que muestra a dos personas votando en dos mesas electorales distintas. En Internet y en las televisiones se han podido ver muchos vídeos en los que se comprueba cómo multitud de personas votaban en una urna en un patio sin ningún tipo de acreditación personal.

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