jueves, 5 de octubre de 2017

El consejo del Banco Sabadell se reúne esta tarde para aprobar el cambio de sede fuera de Cataluña

El consejo del Banco Sabadell se reúne esta tarde para aprobar el cambio de sede fuera de Cataluña

La entidad discutirá esta tarde el destino, con Alicante como principal posibilidad. CaixaBank dice que todavía no han tomado ninguna decisión todavía

Oficina del banco Sabadell en la Rambla de Cataluña de Barcelona. JULIAN ROJAS / ATLAS
El consejo de administración de Banco Sabadell ha convocado una reunión extraordinaria para esta tarde con el objetivo de aprobar un cambio de sede social de la entidad ante la crisis por el desafío independentista catalán, según ha podido confirmar EL PAÍS. Ya está decidido que se va a producir el cambio de domicilio social y lo que se va a discutir es el destino. Las dos opciones que hay sobre la mesa son Madrid o Alicante, aunque la ciudad mediterránea toma cada vez más fuerza como destino final. Tras conocerse la decisión, el banco, que durante esta mañana caía en Bolsa, ha empezado a recuperarse y antes de mediodía ya remontaba por encima del 5%. La decisión mete presión a CaixaBank, también castigada en los últimos días tras el referéndum ilegal del domingo pasado. Esta entidad no ha tomado una decisión todavía sobre su sede social. Al mediodía subía un 3,4% en la Bolsa.
La entidad que preside Josep Oliu ha confirmado el cambio de sede, aunque insiste en que en la reunión de esta tarde se decidirán los detalles. Asegura que el traslado de sede social es simplemente una decisión técnica, que el banco no se posiciona políticamente y que toma las decisiones que considera más adecuadas para proteger los intereses de los clientes. De hecho, el propio Oliu advirtió, este martes pasado, que ante la "inquietante" situación política por la que atraviesa España la entidad financiera tomaría "las medidas suficientes" para proteger los intereses de sus clientes y accionistas.
Oliu también se refirió a la necesidad de contar con un marco jurídico estable. Y es que la entidad no puede permitirse quedarse fuera del Eurosistema ni bajo el paraguas del Banco Central Europeo y la Autoridad Bancaria Europea, que le permiten el acceso a la liquidez en euros y el sistema de garantía de depósitos, el Fondo de Garantía de Depósitos, que se perderían en el caso de una hipotética independencia de Cataluña. Pero además, fuentes del mercado resaltan que con el traslado la entidad podrá competir en igualdad de condiciones con el resto de las entidades financieras españolas, algo que dado el actual contexto político no podían hacer.

Presiones políticas

Desde la propia entidad se admite que la presión política de las autoridades catalanas es considerable por la decisión del cambio de sede. Los máximos responsables del banco han explicado que la salida de Cataluña es "una decisión empresarial, no política", es decir, que no se debe entender como un ataque contra la Generalitat. "Ante esta situación inquietante, se busca transmitir tranquilidad y eliminar las incertidumbres que existen ahora", apuntan fuentes internas del Sabadell. En definitiva, se trata de tranquilizar a los inversores, como se ha visto en Bolsa, y a los clientes, que han retirado fondos, aunque la entidad minimiza las cantidades. "Hay más preguntas y revuelo que retiradas de efectivo", apuntan. A pesar de que la empresa ha remitido un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el vicepresidente del Gobierno catalán, Oriol Junqueras, se ha limitado a decir: "Vaticinios de este tipo de han hecho muchas veces y no han sucedido nunca".
El Sabadell es consciente del rechazo político (y sus consecuencias en el negocio) que tendrá su decisión. No obstante, insisten en que se está "protegiendo a los trabajadores, buena parte de ellos catalanes, accionistas, muchos también catalanes y clientes". La primera reacción llegó de la diputada de la CUP Eulàlia Reguant que, en una entrevista en 'Nació Digital' recogida por Europa Press, ha llamado al Gobierno catalán que deje de trabajar con La Caixa, Sabadell y BBVA, y que el Instituto Catalán de Finanzas sea su banca pública. También ha pedido el control de los puertos y aeropuertos de Cataluña.
Ya ayer los bancos catalanes, el propio Sabadell y CaixaBank acusaban la tensión por el desafío independentista y fueron los valores más castigados en Bolsa, con caídas superiores al 5% y pérdidas de más de 3.000 millones en capitalización bursátil desde el referéndum del domingo. Y reconocían que tomarán las medidas necesarias para preservar los intereses de sus clientes y accionistas en caso de que la situación se desbordase. Entre esas medidas, estaba el cambio de sede, que el Sabadell ya ha decidido.
La opción del cambio de domicilio social de Banco Sabadell lleva ya tiempo sobre la mesa. La opción de llevarse fuera de Cataluña sus cuarteles generales ya cobró fuerza cuando el expresidente Artur Mas convocó las elecciones del 27-S, a las que quiso dar un carácter "plebiscitario" y, en especial, tras la declaración de Junts pel Sí y la CUP del 9-N. Esa cuestión llegó a estar a punto de ser abordada Consejo de Administración del banco, aunque finalmente saltó de la orden del día, según fuentes cercanas a la entidad. El banco consideraba que no podía permitirse ninguna de las incertidumbres que plantean los planes independentistas del Ejecutivo catalán. Pero el argumento de mayor peso es que, como ha recordado en numerosas ocasiones la Comisión Europea, Cataluña quedará fuera de la Unión Europea, algo que la entidad no puede permitirse sobre todo porque perdería los mecanismos de acceso a la liquidez en euros y a la garantía de los depósitos.
La reunión del consejo, que se producirá a las 17.00, analizará dos opciones para la nueva sede: Madrid o Alicante. El Sabadell tiene ahora el domicilio social en Sabadell, pero sus sedes operativas en Cataluña están en Sant Cugat del Vallès y Barcelona. Fuera de la comunidad el Sabadell está en Las Tablas (Madrid) y Alicante. Aunque siempre se ha trabajado con la hipótesis de ir a Madrid, Alicante, donde tiene sede operativa desde que adquirió la CAM, cuenta con varias ventajas. Allí están las oficinas de su brazo inmobiliario, Solvia, y el departamento de marketing de la entidad. Pero además, en Alicante la entidad tiene clonado todo el sistema operativo, lo cual le permitiría trasladarse allí con rapidez. La opción de Oviedo, donde tiene una fuerte presencia, pierde fuerza. Ahora el Sabadell tiene más de 11 millones de clientes en España, Reino Unido, Estados Unidos y México. El negocio en España supone el 70%, mientras que Cataluña representa el 15% del balance de la entidad.

La decisión mete presión a CaixaBank

La decisión del Sabadell mete ahora presión a CaixaBank que es líder en el mercado minorista español y que estos días también está siendo castigada en el mercado de valores. Fuentes oficiales de la entidad aseguran: "No hay ninguna decisión tomada sobre el cambio de sede a fecha de hoy. Cuando haya algo que decir se comunicará". La entidad tiene la sede en Barcelona. Se ha especulado la posibilidad de que pudiera trasladarla a Palma o incluso a Madrid, pero el banco que preside Jordi Gual no confirma este extremo.
CaixaBank, como entidad cotizada, debe seguir lo que ordenan sus estatutos, que para cambiarse, deben someterse al voto de sus accionistas. Ese proceso por los cauces habituales tendría un plazo largo de aplicación, de varias semanas, ya que supondría convocar una junta extraordinaria, someter a votación la propuesta y unos plazos de registro. Según estos estatutos, "la sociedad tiene su domicilio en Barcelona, Avenida Diagonal, 621". El artículo cuatro dice "el domicilio social podrá trasladarse a otro lugar dentro del mismo término municipal por acuerdo del Consejo de Administración. Para proceder a su traslado a un término municipal distinto se precisará el acuerdo de la Junta General de Accionistas".
En principio, no hay opciones fáciles en CaixaBank para un procedimiento tan exprés como el aplicado en Sabadell, que sí puede decidir el cambio de sede con la aprobación del consejo. En otro apartado del mismo artículo sobre la sede social señalan los estatutos que "el Consejo de Administración de la Sociedad podrá acordar la creación, supresión o traslado de sucursales, representaciones, agencias, delegaciones, oficinas y otras dependencias, tanto en España como en otro estado miembro de la Unión Europea o un tercer Estado, con cumplimiento de los requisitos y garantías que le fuesen de aplicación, así como decidir prestar los servicios propios de su objeto social, sin necesidad de establecimiento permanente". habla de "servicios propios de su objeto social", pero no de sede.

Protección para los clientes

Hace dos días, en una nota interna destinada a sus empleados, CaixaBank aseguró que el "único objetivo" de la entidad es "proteger, en todo momento, los intereses de sus clientes, accionistas y empleados", para señalar que eso será lo que guíe "decisiones futuras". Tras conocerse los planes del Sabadell para trasladar su sede social, las acciones de CaixaBank han empezado a remontar y a mediodía subían por encima del 1%.
Según fuentes del sector, Banco Sabadell había mantenido ya contactos con el Gobierno para comunicarle sus planes de trasladar su domicilio social a otra comunidad. El Ejecutivo de Mariano Rajoy asimismo, está teniendo también contactos con CaixaBank ante la difícil situación por la que atraviesan . El ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, ha subrayado este jueves el compromiso de CaixaBank y Banco Sabadell con sus clientes, depositantes y accionistas y las ha definido como "solventes, catalanas, españolas y europeas". "Puedo asegurar que tienen las ideas muy claras y están totalmente comprometidas", declaró el ministro. 
Asimismo, el titular de la cartera de Economía ha calificado de "bastante moderada" la reacción hasta ahora mostrada por los mercados. "La reacción es bastante moderada hasta ahora", dijo Guindos.

No hay comentarios: