El artífice
de la Restauración fue Antonio Cánovas del Castillo
(antiguo ministro de la Unión Liberal) que, con realismo práctico, buscó un
consenso de las fuerzas liberales que permitiera una amplia mayoría en la que
pudiera sustentarse el nuevo sistema político, dándole así estabilidad y
continuidad.
Cánovas fue
el líder indiscutido del partido conservador
hasta que murió en un atentado en 1897.
El líder
del otro partido dinástico (el
progresista) fue Mateo Práxedes Sagasta.
Estos dos
partidos fueron la base del bipartidismo
y del turnismo en los que se sustentó el nuevo sistema político,
cuando esta base falló el sistema de la Restauración entró en una crisis de la
que no salió.
Para iniciar el
proceso Restaurador, Cánovas consiguió que la desterrada Isabel II renunciara a
sus derechos al trono en 1870.
Cánovas,
defendió:
*.- Un sufragio
censitario y una soberanía compartida entre Rey y Cortes, equidistante entre la
monarquía conservadora de Isabel II, constitución de 1845 y la monarquía
democrática de Amadeo I de Saboya, constitución de1869.
*.- El
alejamiento de los militares de la vida política y poner término a sus
pronunciamientos (fuente continua de inestabilidad política en España).
*.- Un sistema
bipartidista (dos partidos burgueses y liberales, que aceptasen el nuevo
sistema y que pacíficamente se fueran turnando en el poder).
*.- La
alternancia pacífica de estos dos partidos dinásticos (los que aceptaban el
sistema de la Restauración, la constitución de 1876 y la monarquía de Alfonso
XII).
El Partido
Conservador de Cánovas representaba a la antigua Unión Liberal y sería también el partido de los
antiguos Moderados. Defensor de la tradición, del orden y de las buenas relaciones
con la Iglesia. Partidario del sufragio censitario y del recorte de las
libertades individuales y colectivas.
Tenía sus
feudos electorales en el medio
rural del sur e interior peninsular.
Sus bases: la vieja nobleza, la aristocracia rural y terrateniente,
la gran burguesía y las clases medias.
El Liberal, liderado por el antiguo progresista Práxedes Mateo
Sagasta, sería el heredero de los ideales de 1869 adaptados a los límites del
sistema canovista.
Sus bases
electorales estaban centradas en las ciudades, la periferia peninsular y el
norte industrial: burguesía comercial e industrial, los profesionales liberales
y la población urbana, Progresistas, radical-constitucionalistas, republicanos
y descontentos de Cánovas.
Defendía el
sufragio universal, el aumento y desarrollo de las libertades y un cierto
laicismo (incluso en determinados casos anticlerical).
Estos dos
partidos controlaron inicialmente toda la vida política, se fueron turnando
pacíficamente en la labor del gobierno y dieron apariencia democrática al
sistema.
Sus diferencias
ideológicas no eran muy importantes. Habían pactado no realizar leyes que el
otro partido necesitase derogar para gobernar.
En la
práctica, su alternancia en el poder no se hacía en función del resultado de
las elecciones sino por decisión del Rey o por un pacto entre los líderes de
los dos partidos.
Las
elecciones estaban adulteradas por el caciquismo.
El sistema de
turno tuvo la gran virtud de garantizar la alternancia pacífica en el
poder, poniendo fin durante un largo periodo al intervencionismo militar y a
los pronunciamientos.
Sin embargo, el
turno fue un puro artificio político, destinado a mantener apartados del poder
a las fuerzas que quedaban fuera del estrecho sistema diseñado por Cánovas.
El turno en el
poder no era la expresión de la voluntad de los electores, sino que los
dirigentes de los partidos lo acordaban y pactaban previamente. Una vez
acordada la alternancia, y el consiguiente disfrute del presupuesto, se
producía el siguiente mecanismo:
El Rey nombraba
un nuevo Jefe de Gobierno y le otorga el decreto de disolución de Cortes
El nuevo
gobierno convocaba unas elecciones completamente adulteradas, “fabricaba” los
resultados mediante el “encasillado”, la asignación previa de escaños en
los que se dejaba un número suficiente a la oposición.
Este sistema de
adulteración electoral no fue único de la España de la época, el
“transformismo” en Italia y el “rotativismo” en Portugal fueron sistemas
similares.
LA
CONSTITUCIÓN DE 1876 (estableció el sistema de la Restauración)
*.- La nueva
Constitución de 1876, en lo fundamental, fue heredera de la moderada de 1845
aunque incorporando algunos aspectos defendidos en el Sexenio. Fue elaborada y
aprobada en unas Cortes constituyentes, elegidas por sufragio universal, con
mayoría canovista.
*.- Inspirada
por Canovas del Castillo, estableció la Soberanía compartida de las Cortes con
el Rey (negando el principio de soberanía nacional).
*.- Cortes
Bicamerales (Congreso elegido y Senado, con senadores de derecho propio,
vitalicios y electos por sufragio censitario):
*.- El Monarca
tenía el poder ejecutivo (designaba a los Ministros y tenía el mando directo
del Ejército), compartía con las Cortes el poder legislativo (teniendo el
derecho a veto de las leyes aprobadas por éstas) y podía convocar, suspender o
disolver las Cortes.
*.- Los
Ayuntamientos y las Diputaciones fueron controlados por el Gobierno y se
suprimieron los Fueros vascos:
*.-
Confesionalidad católica, garantía del sostenimiento del culto y del clero y el
reconocimiento de otras creencias pero sin manifestaciones públicas.
*.- Reconocía
teóricamente derechos y libertades, que en la práctica fueron limitados o
aplazados durante los gobiernos de Cánovas.
*.- No
especificó el tipo de sufragio para elegir el Congreso. Posteriormente, bajo el
gobierno del Partido Conservador de Canovas se aprobó la Ley Electoral de 1878
que estableció el voto censitario, limitado a los mayores contribuyentes.
Con Sagasta se estableció universal.
Varios grupos políticos, sociales e ideológicos no aceptaron el nuevo sistema,
quedando excluidos del mimo:
*.- Los
Carlistas, tradicionalistas y monárquicos, no aceptaron a Alfonso XII como Rey
(no lo consideraron legítimo por una cuestión sucesoria y se oponían al liberalismo
que representaba) en su defensa del tradicionalismo.
*.- Los
partidos republicanos (con base social en las clases medias urbanas),
defensores de una República y contrarios a una Monarquía conservadora..
*. El
movimiento obrero: anarquistas y socialistas poco a poco fueron consolidándose
frente a un régimen político que consideraban burgués, conservador y
clerical.
*.- Los
nacionalistas, principalmente en Cataluña y País Vasco”, en defensa de su
“identidad amenazada” se opusieron a las medidas centralizadoras y
uniformizadoras del “nacionalismo político” del sistema liberal.
*.- La
oposición intelectual, pensadores, profesores universitarios, novelistas… se
mostraron contrarios a un sistema que pensaban que hacía inviables la
modernización del país y la representación
La Restauración abarca un período de la Historia de
España, comprendido entre 1874 y 1923, en el que se restauró la Monarquía y la
dinastía de los Borbones en la persona de Alfonso XII.
Incluyo también
la Regencia de María Cristina (1885-1901) y el reinado de Alfonso XIII
(1901-1931), aunque el sistema político de la Restauración dejó de estar
vigente en 1923, con la Dictadura de Primo de Rivera.
El
pronunciamiento militar del General Martínez, el 29 de diciembre de 1874, inició
la Restauración y puso fin a la I República y al Sexenio Revolucionario.
El sistema de
la Restauración acabó con otro pronunciamiento militar (13 de septiembre 1923),
el que inició la Dictadura de Primo de Rivera.
El artífice
de la Restauración fue Antonio Cánovas del Castillo
(antiguo ministro de la Unión Liberal) que, con realismo práctico, buscó un
consenso de las fuerzas liberales que permitiera una amplia mayoría en la que
pudiera sustentarse el nuevo sistema político, dándole así estabilidad y continuidad.
Cánovas fue
el líder indiscutido del partido conservador
hasta que murió en un atentado en 1897.
El líder
del otro partido dinástico (el
progresista) fue Mateo Práxedes Sagasta.
Estos dos
partidos fueron la base del bipartidismo
y del turnismo en los que se sustentó el nuevo sistema político,
cuando esta base falló el sistema de la Restauración entró en una crisis de la
que no salió.
Para iniciar el
proceso Restaurador, Cánovas consiguió que la desterrada Isabel II renunciara a
sus derechos al trono en 1870.
Cánovas,
defendió:
*.- Un sufragio
censitario y una soberanía compartida entre Rey y Cortes, equidistante entre la
monarquía conservadora de Isabel II, constitución de 1845 y la monarquía
democrática de Amadeo I de Saboya, constitución de1869.
*.- El
alejamiento de los militares de la vida política y poner término a sus
pronunciamientos (fuente continua de inestabilidad política en España).
*.- Un sistema
bipartidista (dos partidos burgueses y liberales, que aceptasen el nuevo
sistema y que pacíficamente se fueran turnando en el poder).
*.- La
alternancia pacífica de estos dos partidos dinásticos (los que aceptaban el
sistema de la Restauración, la constitución de 1876 y la monarquía de Alfonso
XII).
El Partido
Conservador de Cánovas representaba a la antigua Unión Liberal y sería también el partido de los
antiguos Moderados. Defensor de la tradición, del orden y de las buenas
relaciones con la Iglesia. Partidario del sufragio censitario y del recorte
de las libertades individuales y colectivas.
Tenía sus
feudos electorales en el medio
rural del sur e interior peninsular.
Sus bases: la vieja nobleza, la aristocracia rural y
terrateniente, la gran burguesía y las clases medias.
El Liberal, liderado por el antiguo progresista Práxedes Mateo
Sagasta, sería el heredero de los ideales de 1869 adaptados a los límites del
sistema canovista.
Sus bases
electorales estaban centradas en las ciudades, la periferia peninsular y el
norte industrial: burguesía comercial e industrial, los profesionales liberales
y la población urbana, Progresistas, radical-constitucionalistas, republicanos
y descontentos de Cánovas.
Defendía el
sufragio universal, el aumento y desarrollo de las libertades y un cierto
laicismo (incluso en determinados casos anticlerical).
Estos dos
partidos controlaron inicialmente toda la vida política, se fueron turnando
pacíficamente en la labor del gobierno y dieron apariencia democrática al
sistema.
Sus diferencias
ideológicas no eran muy importantes. Habían pactado no realizar leyes que el
otro partido necesitase derogar para gobernar.
En la
práctica, su alternancia en el poder no se hacía en función del resultado de
las elecciones sino por decisión del Rey o por un pacto entre los líderes de
los dos partidos.
Las
elecciones estaban adulteradas por el caciquismo.
El sistema de
turno tuvo la gran virtud de garantizar la alternancia pacífica en el
poder, poniendo fin durante un largo periodo al intervencionismo militar y a
los pronunciamientos.
Sin embargo, el
turno fue un puro artificio político, destinado a mantener apartados del poder
a las fuerzas que quedaban fuera del estrecho sistema diseñado por Cánovas.
El turno en el
poder no era la expresión de la voluntad de los electores, sino que los
dirigentes de los partidos lo acordaban y pactaban previamente. Una vez
acordada la alternancia, y el consiguiente disfrute del presupuesto, se
producía el siguiente mecanismo:
El Rey nombraba
un nuevo Jefe de Gobierno y le otorga el decreto de disolución de Cortes
El nuevo
gobierno convocaba unas elecciones completamente adulteradas, “fabricaba” los
resultados mediante el “encasillado”, la asignación previa de escaños en
los que se dejaba un número suficiente a la oposición.
Este sistema de
adulteración electoral no fue único de la España de la época, el
“transformismo” en Italia y el “rotativismo” en Portugal fueron sistemas
similares.
LA
CONSTITUCIÓN DE 1876 (estableció el sistema de la Restauración)
*.- La nueva
Constitución de 1876, en lo fundamental, fue heredera de la moderada de 1845
aunque incorporando algunos aspectos defendidos en el Sexenio. Fue elaborada y
aprobada en unas Cortes constituyentes, elegidas por sufragio universal, con
mayoría canovista.
*.- Inspirada
por Canovas del Castillo, estableció la Soberanía compartida de las Cortes con
el Rey (negando el principio de soberanía nacional).
*.- Cortes
Bicamerales (Congreso elegido y Senado, con senadores de derecho propio,
vitalicios y electos por sufragio censitario):
*.- El Monarca
tenía el poder ejecutivo (designaba a los Ministros y tenía el mando directo
del Ejército), compartía con las Cortes el poder legislativo (teniendo el
derecho a veto de las leyes aprobadas por éstas) y podía convocar, suspender o
disolver las Cortes.
*.- Los
Ayuntamientos y las Diputaciones fueron controlados por el Gobierno y se
suprimieron los Fueros vascos:
*.-
Confesionalidad católica, garantía del sostenimiento del culto y del clero y el
reconocimiento de otras creencias pero sin manifestaciones públicas.
*.- Reconocía
teóricamente derechos y libertades, que en la práctica fueron limitados o
aplazados durante los gobiernos de Cánovas.
*.- No
especificó el tipo de sufragio para elegir el Congreso. Posteriormente, bajo el
gobierno del Partido Conservador de Canovas se aprobó la Ley Electoral de 1878
que estableció el voto censitario, limitado a los mayores contribuyentes.
Con Sagasta se estableció universal.
Varios grupos políticos, sociales e ideológicos no aceptaron el nuevo sistema,
quedando excluidos del mimo:
*.- Los
Carlistas, tradicionalistas y monárquicos, no aceptaron a Alfonso XII como Rey
(no lo consideraron legítimo por una cuestión sucesoria y se oponían al
liberalismo que representaba) en su defensa del tradicionalismo.
*.- Los
partidos republicanos (con base social en las clases medias urbanas),
defensores de una República y contrarios a una Monarquía conservadora..
*. El
movimiento obrero: anarquistas y socialistas poco a poco fueron consolidándose
frente a un régimen político que consideraban burgués, conservador y
clerical.
*.- Los
nacionalistas, principalmente en Cataluña y País Vasco”, en defensa de su
“identidad amenazada” se opusieron a las medidas centralizadoras y
uniformizadoras del “nacionalismo político” del sistema liberal.
*.- La oposición
intelectual, pensadores, profesores universitarios, novelistas… se mostraron
contrarios a un sistema que pensaban que hacía inviables la modernización del
país y la representación