Ver fotogaleríaAda Colau en la concentración en apoyo a los encausados por la declaración de independencia.MASSIMILIANO MINOCRI
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha reconocido este jueves durante el pleno del Ayuntamiento a Carles Puigdemont, destituido en aplicación del artículo 155 de la Constitución, como “legítimo” presidente de la Generalitat. "Es Puigdemont quien ostenta la legitimidad de las instituciones catalanas, como mínimo hasta que haya elecciones", ha asegurado la alcaldesa en respuesta a una pregunta del PDeCAT. En el tramo final del pleno, minutos después y en respuesta al PP, ha ampliado su argumento: “Soy demócrata y considero que los presidentes son elegidos por la ciudadanía, no cuando por la imposición se pretende destituirlos. Puigdemont está cesado, pero es legítimo aquel que ha sido escogido por la ciudadanía de Cataluña”.
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La crisis entre el depuesto Gobierno catalán y el español ha vuelto a protagonizar el pleno del consistorio de la capital catalana, donde la parte decisoria ha durado apenas veinte minutos. En cambio, se han discutido una docena de proposiciones y preguntas sobre la actualidad política. Así, el pleno también ha reconocido al gobierno de la Generalitat cesado, ha rechazado la declaración de República la semana pasada en el Parlament y también la aplicación del artículo 155. No ha prosperado una proposición del PP que pedía rechazar la declaración unilateral de independencia.
Con 29 votos favorables y 12 en contra el pleno ha aprobado una proposición de ERC por la que el consistorio reconoce al gobierno catalán y el Parlamento surgidos de las elecciones de 2015 “como únicos representantes legítimos del pueblo de Cataluña”. El texto rechaza la aplicación del artículo 155 y “condena la respuesta autoritaria y amenazadora del Estado” el día del referéndum independentista. Entre los votos favorables se cuentan los de la alcaldesa Ada Colau y sus concejales (11 votos), mientras que sus socios del PSC (4 concejales) han votado en contra. También han votado en contra PP y Ciutadans. En cambio, el pleno ha rechazado, con el no de BComú, PSC, Ciutadans y el PP otra proposición de la CUP que llamaba a reconocer la proclamación de la República.
El pleno también ha rechazado otra proposición del PP que pedía rechazar la declaración unilateral de independencia. Con Ciutadans y el PP a favor, y el resto de partidos han votado en contra. El partido de la alcaldesa, Ada Colau, ha asegurado que rechaza la DUI pero ha votado en contra del texto. “Podemos rechazar la DUI pero no podemos hacerlo con un partido que quiere hacerlo como excusa para vengarse”, ha dicho el portavoz del Gobierno, Gerardo Pisarello.
La crisis entre los gobiernos catalán y español ha vuelto a protagonizar el pleno en el Ayuntamiento, donde la parte decisoria ha durado apenas veinte minutos y, en cambio, se discuten una docena de proposiciones y preguntas que obligan a los grupos a posicionarse sobre la declaración unilateral de independencia, la aplicación del artículo 155 de la Constitución, las acusaciones judiciales contra los miembros cesados del Gobierno catalán o la convocatoria electoral.
En este sentido, el PSC no ha logrado apoyo suficiente para que prosperara su proposición a favor del diálogo, respaldando las elecciones de diciembre y invitando a la participación de los partidos en la comisión del Congreso para actualizar el modelo territorial del Estado y reformar la Constitución. Solo PP y Ciutadans han respaldado el texto. PDeCAT, ERC y CUP han votado en contra y Barcelona en comú se ha abstenido. “Las elecciones no son una buena noticia, son un mal menor con un gobierno intervenido. Defendemos la plurinacionalidad y la democracia pero unas elecciones con gente en prisión tienen poco sentido”, ha argumentado el número dos de la alcaldesa, Gerardo Pisarello.
Durante el pleno se ha aprobado otra proposición, con contenido de Declaración Institucional, impulsada por el grupo de la alcaldesa Ada Colau, en defensa del sistema educativo catalán, la profesionalidad de los maestros y que exige a PP y Ciutadans que rectifiquen en sus acusaciones en el sentido de que las escuelas han adoctrinado a alumno a favor del independentismo. El texto pide además a la Generalitat que “emprenda acciones legales contra los autores de las difamaciones y denuncias”. Barcelona en comú ha contado con el apoyo de todos los grupos (PDeCAT, ERC, CUP y PSC), menos Ciutadans y PP, que han votado en contra.
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