PUIGDEMONT, 34; RAJOY, 3
Viernes 22 de diciembre de 2017, 14:14h
Se lo creen, se lo creen. En Moncloa se creen lo que dicen. El pasado mes de abril me dijo un destacado dirigente pepero: “Pero deja de preocuparte. No va a pasar nada. Los independentistas se tiran a matar. Aquello es un caos y todo se quedará en agua de borrajas”. En el mes de septiembre, el ministro de Educación y también otros pesos pesados del PP, declaraban: “No habrá referéndum porque carecen de urnas, de censo electoral, de papeletas… Los Mossosobedecerán al ministro del Interior”. Y aunque la consulta fue un esperpento, hubo papeletas, urnas, censo electoral y los Mossos no solo no obedecieron al ministro del Interior sino que le engañaron como a un pardillo.
Tras aplicar el 155, escuché de un alto dirigente del PP: “Puigdemont es un cadáver político. Todo está desbaratado. Las elecciones serán un paseo para los partidos constitucionalistas”. Y cuando las encuestas empezaron a estropear el paseo, se decidió la solución definitiva: “Que vaya Rajoy a Cataluña, que participe en los mítines. Su carisma volcará las elecciones a nuestro favor. No hay nadie que resista el tirón de Mariano”.
Y ahí están los resultados: Puigdemont, 34; Rajoy, 3. Menuda goleada. Menudo baño. Menudo ridículo. Y como hoy me siento piadoso, no he encabezado este artículo con un título perverso por su alcance nacional: Ciudadanos, 37; Rajoy, 3
Luis María ANSON
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